Salmones procedentes de la parte más septentrional de Noruega en su ambiente habitual, un entorno que le permite desarrollarse en agua dulce y pasar después al mar siguiendo su ciclo natural.

Directo del Atlántico Norte recibimos filetes de bacalao ligeramente curados en sal, todavía húmedos, casi como recién sacados del mar.

Aplicamos los procesos de curación y ahumado en otros pescados, adaptándonos a sus características y tamaño, pero con la misma vocación: lograr un extraordinario sabor.